También llamado el Sepulcro de Mausoleion, fue una tumba construida entre los años 353
y 350 a. de C. en la Ciudad de Halicarnaso
(lo que actualmente conocemos como Bodrum, Turquía), para Mausolo un sátrapa en el Imperio Persa.
Su Construcción:
Esta estructura fue obra del
arquitecto griego Sátiro de Pharos y
Piteo, por encargo de la esposa
Artemisa II y la hermana de Mausolo y
probablemente se comenzó a construir estando el aún con vida; se emplearon solo
a los mejores escultores para su construcción. El Mausoleo medía
aproximadamente de 45 a 50 metros de altura y cada una de las cuatro plantas
estaba adornada con relieves escultóricos creados por los escultores griegos Leocares, Briaxis, Scopas, de Pharos
y Timoteo.
Con mano obra esclava se
llevó a cabo la preparación del terreno, los arquitectos construyeron una
enorme base de forma cuadrangular donde probablemente debían encontrarse los
sepulcros, sobre la cual edificaron un impresionante templo de tres plantas,
cada uno de los lados estaba decorado por uno de los cuatro escultores griegos
ya mencionados. Scopas trabajó en la fachada del este, Briaxis en la del norte, Timoteo en la del sur y Leocares en la del oeste. Tenían una
extensión de 30 metros de frente por 33 de fondo, coronada por una columnata de
estilo jónico que alternaba bellas estatuas de héroes y animales mitológicos.
Sobre la edificación se
alzaba una pirámide truncada de 24 peldaños, sobre la cual podía apreciarse una
enorme cuadriga (era un carro de combate tirado por 4 caballos), de mármol,
esculpida por Phytheos, ocupada a
manera de dos imponentes aurigas, con las figuras de pie del Rey Mausolo y su hermana y esposa Artemisa II las cuales serían obra de Briaxix. La reina supervisó
personalmente la construcción de la obra, misma que duró aproximadamente tres
años, pero lamentablemente no pudo ver el sepulcro finalizado pues ella
falleció poco tiempo antes de culminarla. Pese a la muerte de la reina los
artistas decidieron terminar la obra pues consideraron que tan memorable obra
redundaría en su propia gloria.
El núcleo del Mausoleo se construyó
con piedra verde volcánica en bloques de 90 cm de lado y 30 cm de espesor, con
el exterior de los muros recubiertos con grandes piezas de mármol, las estatuas
eran del mismo material, mientras que otras partes de la tumba se acabaron con
piedra azul caliza, en contraste con los bloques blancos, mientras que el techo
de encima de las columnas estaba adornado con relieves del héroe griego Teseo. Otra de las características importantes
del Mausoleo eran las estatuas que personificaban una batalla entre jinetes
griegos y sus enemigos orientales a tamaño natural, otras estatuas de
personajes de la realeza vestidos a la moda griega pero una vez y media más
altas que el tamaño natural. También había estatuas de griegos cazando
panteras, jabalíes y ciervos, las flechas de los cazadores y las bridas de los
caballos eran de bronce. En la base del podio (estructura que aguantaba las
columnas), había un friso representando a griegos y un grupos de las míticas
guerreras amazonas. Entre las columnas había estatuas de la familia de Mausolo. Sobrevivieron dos grandes
estatuas de un hombre y de una mujer, que se cree representan al rey a su
reina, actualmente ambas forman parte de la colección del Museo Británico.
El techo estaba sostenido
por columnas de mármol de 12 metros de altura, con adornos en espiral (llamados
volutas), en la base del techo se encontraban unos leones de mármol que bien
pudieron formar una hilera y que le protegían del diablo. Las columnas jónicas
eran más elaboradas que las dóricas, y ambas eran empleadas en aquella época en
la construcción de templos y palacios. Aunque la estructura general del
Mausoleo corresponde a un marcado estilo griego, muchos detalles tenían notoria
influencia de los estilos constructivos persas (sobre todo en la base y el
techo).
También se podía observar en
el techo otro friso que mostraba una carrera de carros, probablemente alusiva a
la carrera de carros de cuatro caballos que tuvo lugar a la muerte de Mausolo. También se encontraba una
serie de escalones que formaba un techo en forma de pirámide de mármol blanco
de 7 metros de altura; según estudios cada escalón medía 30 centímetros de alto.
En lo más elevado del Mausoleo había una escultura de un carro tirado por cuatro
caballos de 6 metros de altura que era de mármol y tenía aplicaciones de bronce
y bridas forradas de oro; una estatua de Mausolo
dirigía el tiro de los caballos, la
base del carro era recorrida por un friso que representaba la lucha entre
griegos y centauros (mitad humano, mitad caballo). A lo largo de los pilares
del Mausoleo había aproximadamente 100 estatuas, lo que en aquel tiempo debió
ser una novedad.
Ruinas del Mausoleo |
El Sepelio de Mausolo:
Mausolo fue incinerado como era costumbre en esa época, un sacerdote
dirigió el funeral, al que asistieron muchas personalidades importantes entre
ellos un representante de la Corte Imperial de Persia. Unos portadores llevaron
las cenizas del rey y sus huesos en recipientes de oro para darles sepultura en
el año 352 a. de C. en una tumba subterránea, ese día mataron un rebaño de
ovejas y a cinco bueyes en unos escalones, con el objetivo que la sangre
corriera hacia la tumba más exuberante jamás antes vista; luego de depositar
las cenizas del rey, la entrada se cerró con un bloque macizo de piedra
encajada y se cubrió de tierra. La tumba fue saqueada por ladrones
posteriormente.
Esculturas en exhibición en el Museo Británico |
Destrucción del Mausoleo:
Dieciséis años después de la
finalización del Mausoleo, Alejandro
Mago llegó la ciudad en campaña
contra el Imperio Persa, influenciado por la traición de Mausolo a las ciudades griegas, destruyó toda la ciudad y con ella
el Mausoleo. Los restos que quedaron en pie cayeron en un terremoto en el año
1404, algunas estatuas del costado norte sobrevivieron al quedar cubiertas de
tierra cuando cayó el edificio, un friso utilizado como alcantarilla las tapó
durante años.
El Mausoleo, según dicen
sirvió de inspiración para la construcción del Mausoleo de Alejandro Magno, y cabe señalar que la palabra Mausoleo, es derivada del nombre del Rey Mausolo, y en la
actualidad esta palabra es utilizada para describir tumbas de grandes
proporciones y detalladamente estructurad.
Con una historia de amor
detrás de su construcción, los finos materiales utilizados y la gran cantidad
de detalles espectaculares que le adornaban, el Mausoleo
de Halicarnaso se ganó con creces su lugar dentro de las 7 Maravillas del Mundo, las que hoy por
hoy siguen y seguirán siendo las mayores obras arquitectónicas jamás construidas
por la humanidad.